jueves, abril 30, 2009

El horror de las mujeres quemadas con ácido en Pakistán

El fotógrafo Emilio Morenatti presentará en el Festival Internacional por la Libertad de Expresión (FILE), su trabajo ‘Violencia de Género en Pakistán’, una muestra de quince fotografías a mujeres pakistaníes que han sido objeto de agresiones con ácido.

“Según ha indicado la Asociación de la Prensa de Cádiz en un comunicado, Morenatti saca a la luz unos hechos que en algunos casos superan los peores presagios de hasta donde puede llegar la barbarie humana. El fotógrafo se gana la confianza de estas pakistaníes para destapar una realidad que hasta el momento habían preferido mantener en la intimidad. El resultado es demoledor, y cada foto constituye un documento de valor como denuncia social“.

Cientos de mujeres han sido desfiguradas con ácido o rociadas con combustible por pretendientes despechados o, incluso, por su propia familia.

ADVERTENCIA: Las imágenes son de contenido impactante. Para ver las fotos debe revisar la entrada completa.



Saira Liaqat usa su ojo sano para guiarse mientras cepilla el cabello de una mujer. Su cara, cuya mayor parte derritió el ácido hace varios años, se enciende de vez en cuando con una sonrisa. Sus manos, en su mayor parte intactas, manejan con habilidad los rizos marrones de su cliente.

A solo pasos de ella, Urooj Akbar limpia y pinta con diligencia las uñas de otra clienta. Su cara, marcada por el fuego que quemó el 70 por ciento de su cuerpo, es sombría. Resulta difícil decir si está triste o si, simplemente, es así como luce ahora.

Saira y Urooj están entre las muchas víctimas femeninas de los ataques con combustible o ácido. Este tipo de historia a menudo involucra a un pretendiente despreciado o desquiciado y suele terminar con una vida de desesperación y retraimiento para la mujer.

No en el caso de Saira y Urooj. Aunque no pueden escapar de los numerosos espejos, ni la mirada de las modelos en los afiches, dicen que han llegado a considerar al salón en el que trabajan como un segundo hogar.

Llegaron allí gracias a los esfuerzos de la fundación Depilex-Smileagain, un grupo dedicado a ayudar a mujeres que han sido quemadas con ácido o fuego.

Sobrevivientes


Hace aproximadamente cinco años, Masarrat Misbah, la dueña de la cadena de peluquerías, salía del trabajo cuando una mujer ataviada con un velo se acercó y pidió su ayuda. Cuando se quitó la prenda, Misbah vio por qué.

“Vi a una muchacha que no tenía rostro”, cuenta. La mujer dijo que su marido le había lanzado el ácido. Misbah decidió, entonces, poner un pequeño anuncio de periódico para ver si otras necesitaban ayuda similar.

Cuarenta y dos mujeres respondieron.

Misbah se puso en contacto con Smileagain, una fundación italiana que proporciona ayuda médica a las víctimas de esta práctica atroz en otros países. Con la ayuda de médicos paquistaníes, habilitó un hospital y un refugio especiales para las 240 víctimas registradas en su lista en Pakistán.

Su trabajo es un reflejo de cuán comunes llegan a ser estos casos. Aunque la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán reportó, en 2007, 33 mujeres quemadas con ácido y 45 a las que les prendieron fuego, Misbah asegura que la gran mayoría de casos se quedan sin ser denunciados, o por el miedo de las mujeres atacadas o por la falta de recursos para asumir los costos de una demanda.

El salón en el que trabajan no es uno más. Entre las modelos perfectas de L’oreal y Revlon, hay un afiche que se destaca, con el rostro desfigurado de una mujer y la leyenda: ‘Ayúdenos a devolverles la sonrisa a estas sobrevivientes”.

Saira aún usa labial, y a menudo se encuentra contando su historia para las clientas que le preguntan. Aunque su marido está en prisión por intento de homicidio, los dos todavía están casados legalmente.

Urooj es más reservada, y no habla con facilidad de los años de abuso que vivió en su matrimonio. Cuenta que hace aproximadamente tres años, su marido la roció con kerosene y le prendió fuego. Ella nunca lo denunció y ahora ni siquiera le permiten ver a su hija.

Aunque extendido en Pakistán, este fenómeno no es exclusivo de ese país. Casos similares se han reportado en la zona en disputa de Cachemira, en la frontera con india, así como en Afganistán. En este país, docenas de mujeres han sido atacadas con ácido por negarse a usar burka o por salir a la calle sin la compañía de un hombre.

¿Sabías que…

…en los países pobres, las niñas, desde los cinco años, trabajan de cuatro a dieciséis horas diarias en tareas domésticas?

…las mujeres poseen menos del 1% de la riqueza del planeta?

…hay países donde las mujeres no tienen derecho al voto?

…en África, nueve de cada doce jóvenes infectados de sida son del sexo femenino?

…135 millones de mujeres y niñas han sufrido la mutilación genital?

…las mujeres ocupan en el mundo menos del 10% de los escaños en los parlamentos?

SOS: minan en Latinoamérica derechos sexuales y reproductivos

Por: Sandra Chaher
Una durísima avanzada fundamentalista se expande sobre América Latina, especialmente América Central, desde hace tres años. Nicaragua, México y República Dominicana son los primeros países en los que los sectores conservadores están logrando minar el acceso a los derechos sexuales y reproductivos.

La semana pasada el Parlamento de República Dominicana aprobó, en el marco de un proceso de reforma de la Constitución, un artículo que consagra que ''el derecho a la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte''.

México también se encuentra en estado de alerta: desde octubre del 2008, 11 estados aprobaron leyes que dan estatus jurídico al embrión al ''proteger la vida desde el momento de la fecundación o la concepción hasta su muerte natural''.


En República Dominicana más de 170 diputados y diputadas le dieron el visto bueno a la propuesta del Poder Ejecutivo, y sólo 30 se opusieron, pero existe aún la posibilidad de que este voto minoritario por el momento se expanda si, en una segunda lectura del proyecto, se logra el apoyo de la mitad del Congreso.

Apostando a que en la segunda instancia la medida pueda ser revertida, se conformó la Coordinación Nacional de Asistencia al Retroceso, que reúne a numerosos sectores de la sociedad civil que en estos días están intentando que sus voces trasciendan las fronteras y así lograr un apoyo que presione sobre el Poder Ejecutivo.

Si bien el aborto está prohibido en todos los casos en República Dominicana –al igual que en El Salvador, Honduras, Chile y Nicaragua--, la consagración del derecho a la vida desde la concepción en la Constitución Nacional sería un antecedente que dificultaría enormemente cualquier intento de apertura en la legislación.

MÉXICO Y NICARAGUA


México también se encuentra en estado de alerta: desde octubre del 2008, 11 estados aprobaron leyes que dan estatus jurídico al embrión al ''proteger la vida desde el momento de la fecundación o la concepción hasta su muerte natural''. Los proyectos fueron presentados por parlamentarios del Partido de Acción Nacional (PAN) y Partido Revolucionario Institucional (PRI), quienes ya presentaron iniciativas similares en otros siete estados que serán tratadas en los próximos meses.

Esta fue la articulada y enérgica respuesta de la derecha política ante la aprobación de la interrupción legal del embarazo (ILE) en el Distrito Federal de México hace exactamente 2 años (el 24 de abril del 2007).

En Nicaragua, donde el aborto terapéutico estaba permitido desde 1893, la prohibición llegó arropada con el traje del Frente Sandinista de Liberación Nacional que hizo campaña para las elecciones nacionales del 2006 incluyendo como una de sus banderas la penalización total del aborto, hasta lograr la reforma del Código Penal en junio de ese año.

Nicaragua: Maquilas "alzan vuelo" y, con ellas, el empleo femenino

Por: Sylvia Torres y
Linskat Legall.
SEMlac


La mano de obra femenina será la más golpeada ante la inminente clausura de ocho empresas del régimen de zona franca industrial en Nicaragua.

El cierre de las empresas provocará la desaparición de 8.850 plazas laborales, 75 por ciento ostentadas por obreras, 38 por ciento de las cuales son madres solteras, reveló Sandra Ramos, directora del Movimiento María Elena Cuadra (MEC). A su juicio esta situación podría causar "desempleo masivo en el país".

La dirigente, quien calificó de grave la situación, informó que entre 2008 y lo que va de 2009 han desaparecido unos 20.000 empleos en empresas bajo régimen de zona franca, debido al cierre parcial o total de "marcas" que enfrentan dificultades para operar por falta de contratos.

La industria textilera abarca 30 por ciento de la población ocupada en el sector manufacturero y cerca de la mitad de la mano de obra en ese ramo son mujeres.


En el primer trimestre de este año "volaron" nueve maquiladoras, mientras otras lo harían antes de terminar el año. Entre las empresas que cerraron operaciones están Hansae, que ha despedido a 1.400 personas; Santamaría que dejó fuera a 1.000 trabajadores; y Cone Denim que cesanteó a otros 830.

"Ahora que la empresa cerró, no se cómo vamos a hacer con las necesidades de la casa, porque mi marido es vendedor ambulante. A pesar de todo, tengo fe que me va a contratar alguna", declaró a SEMlac Yarlith Mejía, ex trabajadora de Managua.

Debido a que 90 por ciento de la mano de obra se concentra en la capital, los despidos son mucho más elevados aquí que en el resto de las regiones del país.

Uno de los principales problemas para las trabajadoras es que las empresas se marchan sin cumplir con sus obligaciones laborales. A esto contribuye el Ministerio del Trabajo, al autorizar suspensiones temporales a las empresas, lo cual abre la posibilidad de que sus dueños puedan irse del país sin cumplir con sus obligaciones laborales.

"Si se van y cierran, no podemos hacer nada. Nos pagan en abonos y en los plazos que ellos quieren y no en lo que dice la ley", explica Yahaira Mendoza.

Según datos ofrecidos por Ramos, muchas empresas se han trasladado a otras naciones, "la oferta de mano de obra es más barata en Asia y África. Se van porque se cancelaron o redujeron las órdenes de compra de tiendas en Estados Unidos".

La líder del MEC desestimó las declaraciones de José Adán Aguerri, presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada, quien atribuyó el cierre de maquilas a la alteración de los costos de operación provocada por aumentos en el salario mínimo hasta en 33 por ciento.

Un total de 121 empresas de origen taiwanés, estadounidense y surcoreano operan en Nicaragua bajo un régimen especial de Zona Franca, en su mayoría en el sector de la confección de ropa y accesorios, cuyas exportaciones están dirigidas principalmente a Estados Unidos.

Pero ese "no es capital que se queda, o genera riqueza al país, esas empresas se llevan las ganancias; esa inversión va afuera, va a dónde hay más ganancia a costo de salarios baratos", criticó María Mendoza, trabajadora del consorcio las Mercedes.

En consecuencia, ahora el mercado laboral explotado es el camboyano, donde los salarios oscilan entre los 60 y 70 dólares mensuales y los niños menores de 14 años tienen cédula para trabajar, los cuales en su gran mayoría son mujeres.

Entre los nuevos inversionistas que inician operaciones en Nicaragua, está un consorcio mexicano de confección, que promete abrir unas 3.000 plazas de trabajo, con planes de ampliarlas a 9.600.

Ramos advirtió que "este país tiene grandes retos en el tema económico, no sólo con el cumplimiento de los derechos laborales, sino también en la creación de condiciones adecuadas para el atractivo del inversionista y para la formación de mano de obra calificada".

"En Nicaragua, el clima político, durante los últimos 20 años, no ha permitido que empresas de capitales más sólidos y estables hayan querido invertir", insistió.


Remedio peor que la enfermedad


El Movimiento María Elena Cuadra exige al gobierno la generación de empleos con política de género. "El gobierno se debe esforzar por las mujeres trabajadoras, que se califique a las jóvenes que están entrando a trabajar en la maquila y así, cuando la crisis pase, Nicaragua se encuentre calificada para una mejor inversión en la maquila".

"Aunque las zonas francas generan empleo, no siempre se respetan los derechos laborales o la igualdad de oportunidades", asegura Sandra Ramos. A pesar de ser una industria relativamente joven en el país, la maquila es una de las áreas donde hay más denuncias de violaciones de derechos laborales y humanos, agregó.

Una práctica habitual dentro de la maquila es el despido de trabajadoras veteranas y la contratación de jóvenes.

La nueva inversión en el país no está generando la cantidad de empleo que se requiere para solventar el despido masivo que ha sido de 27.000 en los últimos tres años y el cierre de 29 empresas que funcionaban en el territorio nicaragüense.

Mucha de esta nueva inversión generará empleo de poca calidad como es el caso del empaque de ropa de segunda mano, lavado, planchado y teñido de ropa o el lavado de telas. A juicio de Sandra Ramos, "el remedio va a ser peor que la enfermedad".

En su propuesta al gobierno, Ramos remarcó que "Nicaragua necesita un gran esfuerzo en la reconstrucción política, social y económica, con el fin de superar las dificultades asociadas con la mala práctica laboral dentro de la zona franca, mejorar el uso sostenible de recursos, igualdad de oportunidades y el desarrollo social de los trabajadores de la maquila".

A nivel Centroamericano, los empleos generados por la industria textilera en el 2008 fue de 411.502 empleos directos. Al cierre del mismo año, los desempleados de esa industria alcanzaron los 51.538 trabajadores, una disminución del empleo en términos porcentuales de 13,5 por ciento.

México: Jóvenes del DF tendrán anticonceptivos gratuitos e información

Por: Gladis Torres Ruiz/CIMAC
La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) estableció que el Gobierno del Distrito Federal (GDF) deberá garantizar para la juventud del DF la adquisición gratuita de métodos anticonceptivos efectivos, así como proporcionarles la información correspondiente, con el objetivo de que disfruten y ejerzan plenamente su sexualidad, y decidan de manera consciente y plenamente informada el momento y número de hijas e hijos que deseen tener.

El embarazo en la adolescencia es considerado un problema, ya que implica mayor riesgo de mortalidad materna, menores oportunidades de educación y, en ocasiones, el abandono total de los estudios, así como el fortalecimiento del círculo de la pobreza y un mayor riesgo de daño y mortalidad infantil.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera como embarazo adolescente o temprano aquel que ocurre entre los 15 y los 19 años de edad.


Por ello, según información de la ALDF, la Comisión de la Juventud aprobó el pasado 24 de abril reformas a la Ley de las y los Jóvenes del DF, las cuales mandatan al Instituto de la Juventud la creación de la “Tarjeta Joven”, la cual, a través de convenios, permitirá a este sector de la población acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva, así como a espacios de entretenimiento, deportivos y a descuentos en el transporte público.

El Gobierno capitalino deberá también celebrar en la segunda semana de agosto de cada año el Festival Internacional de las Juventudes de la Ciudad de México, en que se expresarán las manifestaciones artísticas, musicales, literarias, científicas, tecnológicas, producciones cinematográficas y en general cualquier expresión cultural, en el marco de las celebración del Día Internacional de la Juventud.

El Consejo Nacional de Población (Conapo) afirma que el inicio de la actividad sexual constituye una transición crucial en la vida de las mujeres jóvenes, quienes no siguen la secuencia tradicional de tener relaciones hasta después del matrimonio o unión. Los patrones del curso de vida se encuentran profundamente vinculados al lugar que ocupan las mujeres en la estructura social.

El dictamen, nacido de las iniciativas del diputado Mauricio Alonso Toledo Gutiérrez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD); Jorge Romero Herrera y Miguel Ángel Errasti, del Partido Acción Nacional (PAN), busca también ofrecer condiciones para que las y los jóvenes puedan tener acceso al empleo y créditos de vivienda.

En este punto, el Instituto de Vivienda del DF promoverá sus programas entre este sector de la población, dando una correcta asesoría sobre los requerimientos técnicos para facilitar la adquisición de créditos a las y los jóvenes que cumplan con los requisitos salariales y residan en la capital.

La Ley el Congreso de Jóvenes del DF, establece que se abrirá en la ALDF un espacio para que las y los jóvenes especialistas, Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) e instituciones de asistencia privada intervengan en el diseño y evaluación de la política de juventud; mientras que el Parlamento de la Juventud, con sede en el Recinto Legislativo, será un órgano colegiado, plural e incluyente, que se celebrará cada año durante el mes de agosto.

El dictamen, aprobado por el grupo de trabajo que preside el diputado Jorge Romero Herrera, señala que para contribuir al combate de la deserción académica, el Instituto de la Juventud celebrará los convenios necesarios para obtener descuentos en el transporte público a jóvenes que cuenten con la “Tarjeta Joven”.

Además, se deberán celebrar convenios para la obtención de precios preferenciales para centros de entretenimiento, tales como cines, museos, exposiciones, galerías, conciertos, performances y obras teatrales, así como a gimnasios y centros deportivos.

La Ley también establece que las y los beneficiarios de la “Tarjeta Joven” estarán obligados a retribuir a la sociedad los beneficios de la misma, a través de su participación en las jornadas comunitarias, acciones ecológicas u observatorios ciudadanos contra la delincuencia, siempre que desee obtener mayores beneficios a través de esa tarjeta.

Asimismo, se establece que las instituciones, dependencias y órganos desconcentrados del DF darán, en los términos de ingreso al Servicio Público de Carreras, preferencia en el reclutamiento para ocupar las plazas vacantes a las y los jóvenes que hayan presentado su servicio social o sus pasantías en ellas.

La Ley plantea como plazo para publicar el Plan Estratégico para el Desarrollo Integral de la Juventud del DF, el primer lunes de agosto del primer año de administración, en tanto que en las últimas dos administraciones no han elaborado este documento y a la fecha no se ha presentado dicho plan.

Del Movimiento Femenino Cubano, sus antecedentes...

Por: Maria Elena Calderín/Revista Mujeres
Definitivamente, durante las décadas de los 20 y 30 del siglo pasado se establecieron en Cuba las bases para la radicalización de la lucha por los derechos de la mujer

La historiografía relacionada con el sector femenino en Cuba conserva, felizmente, valiosos documentos que permiten afirmar que, fue en esa época en la que se establecieron los principios que hoy sustentan a la Federación de Mujeres Cubanas, gracias a valientes mujeres que desafiaron el momento histórico que les tocó vivir.

El 21 de mayo de 1918 nació el Club femenino de Cuba, una organización que, aunque no era representativa de todos los sectores de la sociedad, sí fue la encargada de promover un primer intento por agrupar a las mujeres cubanas en el año 1921 alrededor de un único objetivo: el respeto a sus derechos. Un segundo antecedente fue en el año 1931 y un tercero en 1939, con la creación de la Federación Democrática de Mujeres Cubanas.


En abril 1922 se efectuó el primer congreso de mujeres en Cuba, dos años después tuvo lugar el segundo y no fue hasta 1939 que lograron reunirse de nuevo.

Estas reuniones se caracterizaron por la polémica alrededor de los conceptos que allí expusieron un grupo de mujeres, como las destacadas académicas Vicentina Antuña, Camila Enriquez Ureña , Mirtha Aguirre y Rosario Novoa, sobre todo, porque estaban planteando un cambio en la educación.

Sin embargo, fue en el Tercer Congreso Nacional de Mujeres de 1939 donde se definieron las líneas a seguir por el movimiento femenino cubano. El evento se llevó a todos los rincones de la capital, duró todo ese año 1939 e involucró no solo a las mujeres, sino a artistas, intelectuales y otros sectores de la sociedad cubana.

Gracias a la gestión directa de las miembros de su Comité Organizador y a sus vínculos con figuras de las artes, cantantes y otras manifestaciones culturales, hicieron uso de escenarios muy conocidos de la capital, como teatros y sitios donde se efectuaban espectáculos públicos para llevar el mensaje contenido en el lema del congreso: Por la paz y el progreso de Cuba.

Asistieron 2 mil delegadas. Por primera vez estuvieron representadas las obreras. Fue el marco propicio para crear asociaciones que llegaron a sumar 36 en todo el país, de acuerdo a la procedencia de las 50 mil mujeres que lo integraron.

No obstante el silencio de la mayoría de la prensa de la época, las actividades de aquel congreso quedaron plasmadas en algunos periódicos que hoy se conservan.

Su impacto fue tal que, también por primera vez, fueron invitadas tres mujeres a la Asamblea Constituyente.

El movimiento feminista en Cuba, nacido en las primeras décadas del siglo pasado, cumplió un papel revolucionario al permitir la obtención de importantes reivindicaciones en fechas muy tempranas, tales como la Ley de la Patria Potestad (1917), La ley del Divorcio (1918) y la Ley del Sufragio Femenino (1934). De esta forma se convirtió Cuba en uno de los países con uno de los importantes movimientos feministas de América Latina y uno de los tres primeros que tuvo el voto de las mujeres y la ley del divorcio.

Otras conquistas han logrado las mujeres cubanas en todos los ámbitos de la vida nacional partir del triunfo dela Revolución, 1959. Durante el octavo congreso de la Federación de Mujeres Cubanas, que tendrá lugar en los primeros días del próximo mes de marzo, la labor fundamental de sus casi cuatro millones de afiliadas dista mucho de aquellos reclamos de principios del siglo pasado. Ahora su labor primordial es perfeccionar el trabajo de dirección a los niveles de base, involucrar en cada una de sus metas a las jovencitas, que serán, en definitiva, las continuadoras de aquelle pléyade de valientes cubanas que se enfrentaron a las retrógradas ideas de su época e hicieron una Revolución.

La Federación de Mujeres Cubanas, presidida, desde su nacimiento por la desaparecida Vilma Espin, no es más que el legado y la continuación de aquellas ideas por la reivindicación de la mujer.

Declaración de la Primera Reunión Regional sobre “Buenas Prácticas en Contra de la Demanda y de la Legalización de la Prostitución: Siglo XXI

Fuente: Cuadernos Feministas
Las Mujeres y Hombres de Latinoamérica y el Caribe, convocadas/os por la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en esta Región (CATWLAC), reunidas/os en México, Distrito Federal del 23 al 25 de marzo del 2009; preocupadas/os por el alarmante incremento de la trata y tráfico de mujeres, niñas, y jóvenes para la prostitución y otras formas de explotación sexual, explotación laboral y tráfico de órganos y tejidos, todas formas graves de violación a los derechos humanos que atentan contra la vida y la dignidad de las mujeres y las niñas y la seguridad de nuestros pueblos y naciones, no podemos permanecer indiferentes, ni en silencio, y por lo tanto:


Considerando:

Que la Trata y el Tráfico de Mujeres, Niñas, y Jóvenes en la Región Latinoamericana y del Caribe es un fenómeno creciente, debido, entre otros, a las relaciones patriarcales de poder, a la situación de pobreza y pobreza extrema; al genocidio producido por el hambre; el encarecimiento de los productos básicos; la falta de oportunidades; las profundas disparidades y desigualdades entre las mujeres y hombres; la violencia y la discriminación que históricamente han sufrido las mujeres en nuestros países, agravada por su condición de edad, origen étnico, retos especiales, creencias religiosas, y otras exclusiones; y a que en varios países no se cuenta con políticas públicas, programas, planes de acción y leyes, y aunque existan en algunos, no muestran resultados verdaderamente efectivos, hasta ahora, en la prevención, protección y combate a estos flagelos.

Que la Trata y el Tráfico de Mujeres, Niñas, y Jóvenes en nuestra Región, como en otras partes del mundo, se ve agravada por la trata interna con propósitos de prostitución y otras formas de explotación sexual, laboral y tráfico de órganos y tejidos, abusando de la situación de vulnerabilidad y pobreza de las víctimas y posibles víctimas, siendo éste un fenómeno mucho más extendido que la trata internacional.

Que la Trata y el Tráfico de Mujeres y Niñas es una forma grave de violencia contra las mujeres según se establece en la Plataforma y Plan de Acción de Beijing, así como una forma contemporánea de esclavitud.

Que el Dolor que Sufren las Víctimas y sus Familias y las consecuencias que tiene sobre sus hijas e hijos, madres y padres, es irreparable, y los sistemas de justicia ofenden nuevamente a las víctimas estigmatizándolas y revictimizándolas, negándoles el acceso a la justicia y a la reparación y resarcimiento del daño ocasionado. Que en consecuencia, hasta en tanto no se haga visible y se comprenda su gravedad, no habrá sanción efectiva y seguirá creciendo la inmensa impunidad y corrupción que rodea al problema, propiciado por el patriarcado y el sistema de administración de justicia que lo minimizan y naturalizan, perpetuando los patrones culturales patriarcales e incumpliendo las responsabilidades adquiridas a nivel internacional y regional.

Que ante el avance de las Redes Prostitucionales en nuestra Región, los medios de comunicación, y los proveedores de servicios de internet, así como otros actores, juegan un papel de complicidad por lo que deben ser llamados a cuentas y a conducirse con ética y responsabilidad social.

Que Cualquier Forma de Violencia contra las Mujeres, entre ellas, la Trata y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Jóvenes es un obstáculo que impide la democracia, el desarrollo y la paz, y que urge frenar, rechazar y atacar la naturalización y banalización del problema, emitiendo y ejecutando políticas de desarrollo social, prevención, sanción y seguridad de los Estados y de los sistemas de justicia, acordes a la dimensión de este flagelo, para recuperar el derecho de las mujeres, niñas y jóvenes a una vida libre de violencias.

En Consecuencia, Exigimos:

Primero.
El respeto y el cabal cumplimiento de la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra las Mujeres (CEDAW), de las Recomendaciones Generales y de las Observaciones Finales por país de ese Comité, así como la ratificación inmediata de su Protocolo Facultativo, en el caso de los países que no lo hayan hecho.

Segundo.Exigimos a nuestros Gobiernos políticas públicas, planes de acción debidamente financiados, así como leyes efectivas contra la trata y el tráfico de mujeres, niñas y jóvenes para la prostitución y otras formas de explotación sexual, laboral y tráfico de órganos y tejidos. Proponemos la elaboración inmediata de una Ley Marco que rija en el Sistema Interamericano, que garantice la prevención, la protección de las víctimas, persecución, enjuiciamiento y sanción de los tratantes y explotadores, e incluso, adoptar medidas legales y de otra índole para desalentar y sancionar la demanda, ya que, firmemente creemos que sin demanda no hay explotación.

Tercero
.Rechazamos la corrupción y las redes de complicidad que amparan a la delincuencia organizada nacional e internacional, dedicada a traficar y tratar mujeres, niñas y jóvenes. De igual modo, repudiamos el avance del crimen organizado en nuestra Región, ya que no podemos, ni debemos permitir su naturalización en nuestras sociedades y nos pronunciamos para que no se sigan usando mujeres, niñas y jóvenes para el tráfico de drogas y, en cambio, se les reconozca como víctimas y no como delincuentes.

Cuarto.
Llamamos a los Gobiernos de la Región Latinoamericana y del Caribe que no lo han hecho, a ratificar el Convenio para la Represión de la Trata de Personas y de la Explotación de la Prostitución Ajena y los Protocolos Adicionales a la Convención de Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Trasnacional sobre Trata y Tráfico de Personas, también conocidos como Protocolos de Palermo; y a llevar a cabo una efectiva armonización de estos tratados en su derecho interno.

Quinto.
No podemos tolerar la utilización de bebés para sexo oral, ni la prostitución de niñas y niños, ni las formas variadas de pornografía, ni el turismo sexual. Condenamos enérgicamente que se legisle sobre el consentimiento como causa excluyente del delito.

Sexto. Exigimos a nuestros gobiernos el cumplimiento irrestricto de las Metas del Milenio, garantías económicas y sociales de desarrollo humano que garanticen el derecho a la vida digna, el combate frontal y decidido a la pobreza y la pobreza extrema, así como la hambruna que amenaza la paz interna de nuestros países y que se constituye en un genocidio físico y moral por la violación al principio de la debida diligencia; el cuidado y no encarecimiento del agua y la adopción de medidas eficaces contra la destrucción de la tierra.

Séptimo
.Demandamos justicia y paz en Latinoamérica y el Caribe, porque las mujeres, las niñas y las jóvenes tenemos derecho a una vida libre de todas las violencias y a gozar de todos los derechos sociales, económicos, culturales, civiles y políticos, por lo que se les debe dotar de mecanismos de exigibilidad y justiciabilidad. Además, la ratificación inmediata del Protocolo Adicional al Pacto de Derechos Sociales, Económicos y Culturales.

Octavo.
Exigimos que se reconozca el aporte, la experiencia y la sabiduría de las defensoras de los derechos humanos de las mujeres, expertas por su labor y su compromiso, celebrando consultas con las organizaciones y redes existentes en la región, cuando se elaboren políticas y se tomen medidas para la prevención, la protección y la sanción de la trata y el tráfico de mujeres, niñas y jóvenes. Todas las leyes, acciones o políticas deben ser género sensitivas, no pueden ser neutrales al género. También exigimos el establecimiento de medidas de protección para las personas que trabajan en la defensa de los derechos humanos de las víctimas y posibles víctimas de la trata de personas para cualquier forma de explotación, especialmente la prostitución y todas las formas de explotación sexual.

Noveno.Rechazamos firmemente las propuestas de legalización y regulación de la prostitución que sólo favorecen a la industria del sexo y convierten a los Gobiernos en agentes activos del comercio sexual ubicándolos como Estados prostituyentes. Igualmente demandamos la derogación inmediata de cualquier ley, ordenanza contravencional o cualquier norma que reglamente o regule la prostitución y exigimos, en cambio, políticas públicas que garanticen oportunidades económicas y sociales, y condiciones y oportunidades plenas para el sano desarrollo y la integridad de las mujeres, niñas y jóvenes, así como opciones de salida digna para las víctimas. En cambio exigimos el respeto irrestricto de la Plataforma y Plan de Acción de Viena 1993 sobre Derechos Humanos y el Cairo de 1994, así como el reconocimiento y respeto de los derechos sexuales y reproductivos de todas las mujeres de nuestra Región.

Décimo
.Exigimos protección, asistencia y reincorporación social efectivas para las víctimas de trata, desde un enfoque de derechos humanos y perspectiva de género, integral y holístico. Las víctimas no deben ser sujetas a procedimientos penales, detenciones o multas. Así mismo exigimos leyes efectivas y eficientes para la protección de víctimas y testigos, independientemente de que brinden su colaboración en el proceso judicial, garantizando su derecho a ser escuchadas y decidir sobre su repatriación.

Décimo Primero
.Exigimos a nuestros Gobiernos la aparición con vida de todas las mujeres, niñas y jóvenes desaparecidas en democracia por las redes internacionales y nacionales de prostitución.

Décimo Segundo.Exigimos el cese inmediato de todos los operativos y represión a las mujeres, niñas, niños y jóvenes en situación de prostitución. Son víctimas, no criminales y por lo tanto no deben ser perseguidas, ni sancionadas.
Décimo Tercero. Aspiramos a compartir un mundo cuyos parámetros de civilización y democracia nos permitan un efectivo progreso sustentado en los principios universales de los derechos humanos de las mujeres, niñas y jóvenes. Así mismo reivindicamos una sexualidad humana plena, libre y potenciadora de un eros que hasta ahora ha estado ausente en la vida de las mujeres, una sexualidad libre de toda opresión económica y cultural donde las mujeres sean dueñas de su cuerpo y de su vida.

Convocamos:

Al Movimiento Feminista, de los Derechos Humanos y movimientos sociales de Latinoamérica y del Caribe y de todas las regiones y países del mundo, para que hagan suyo este pronunciamiento y condenen, colectiva e individualmente, la trata de mujeres, niñas y jóvenes para todas las formas de explotación y la compra-venta de seres humanos que reduce su dignidad al comercio carnal y a las formas modernas de esclavitud.

También convocamos a todas las Organizaciones y personas integrantes y simpatizantes de la CATWLAC a:

1.Elaborar un Informe Anual que relate la situación de la trata en cada uno de nuestros países y en la Región de Latino América y del Caribe.

2.A convocar y participar en el Premio Latinoamericano por la Vida y la Seguridad de las Mujeres.

3.A fortalecer y acrecentar las redes nacionales y la red Latinoamericana de CATWLAC, sobre todo en el Caribe Anglo-Parlante, Puerto Rico, Brasil y Chile.

4.A formar y fortalecer el Consejo Directivo de la CATWLAC.

5.A fortalecer la capacidad de incidencia de la CATWLAC en todos los organismos regionales: MERCOSUR, PARLATINO, CARICOM, Comisión Andina, PARLACEN, OEA, Cumbre Iberoamericana, etc.

6.A fortalecer la capacidad de búsqueda de fondos y la comunicación entre integrantes de las redes nacionales, Sub-Regionales y en la Región.

7.A luchar por la criminalización de la demanda y contra la legalización de la prostitución que promueve la trata de personas para la explotación sexual.

8.A todas las organizaciones de sobrevivientes de la trata y la explotación sexual a organizarse en torno a nuestros postulados.

9.A participar en el Observatorio Latinoamericano de Justicia y Género, haciéndonos responsables del componente de trata de personas.

10.A condenar la prostitución como trabajo, no es un trabajo, sino un medio esclavizante y cosificador de sobrevivencia que pone a las mujeres y las niñas en grave peligro y violación a sus derechos humanos.
11.A no darnos por vencidas/os y soñar que un mundo libre de trata, prostitución y otras formas de explotación sexual y explotación en general es posible.

Condenamos y Rechazamos:


Cualquier intento de criminalizar las acciones que realizan las mujeres latinoamericanas, caribeñas y del mundo por la paz, la justicia y el desarrollo, especialmente a nuestra Compañera Violeta Delgado y demás feministas Nicaraguences, en Nicaragua y nuestra Compañera Julieta Montaño en Bolivia.

Dado en el Distrito Federal, México, el “Día Internacional contra la Esclavitud y la Trata Transatlántica”, 25 de marzo del 2009.

¡Por la Vida de las Mujeres, No más Impunidad!

¡Contra las Violencias, Todas las Voces!

¡Ni una Mujer más Víctima de las Redes de Prostitución!

¡Por el combate efectivo y eficaz a la pobreza, al hambre y por la dignidad!

¡No a la legalización de la prostitución y del negocio prostituyente!

¡Las mujeres en las mesas de diálogo, negociación y toma de decisiones!

Género y Étnia

Reconstrucción identitaria y el “nuevo rol” de la mujer en la organización político social Mapuche-Lafkenche (1)

Rodrigo Sepúlveda

-Resumen

La relación cuerpo-mujer-indígena como objeto, naturaleza, definible y administrable tanto para el constructo científico, como para el Estado-Nación, supone una desigualdad de naturaleza ontológica, que viene a reivindicar en un orden político, la diferencia sexual en sus características “naturales” e “históricas”. Dicha lógica se concatena a partir de la nomenclatura; identidad, código cultural y representación, que determina todo orden de discriminaciones, definiendo a un otro identificable-identitario, como el escenario “natural” de aquella segunda naturaleza, liberada en la espacialidad y narrada por la interpretación histórica, doblegada y por ende constituida desde un doble antagonismo; sexual y cultural. La presente investigación viene a cuestionar los supuestos que organizan las relaciones de género-etnia, tanto desde el enfoque estructural, como desde la investigación militante, des-nudando desde una epistemología feminista, las contradicciones inherentes a la construcción y pertenencia identitaria, según los roles asumidos por mujeres en uno y otro caso, y su relevancia en los procesos de reivindicación político-social.


-La sexualidad en la interpretación de la cultura mapuche

"EL Gran Poder: Füta Chaw, envió a una estrella- hija suya- con figura de varón para poblar el desierto de la Tierra. El hombre cae de cabeza al árido suelo volcánico y queda inconsciente.
Ante esta contingencia que le impedía cumplir su misión, el Gran Poder, decide enviar otra estrella- ahora con forma de mujer- para que lo despierte.
Pero este ser estelar viene mejor dotado que el anterior, como cae de pie, muy bien asentada en lo concreto y en lo real, pero lejos de su compañero celeste y ahora terrestre, las plantas de sus pies disponen de una particularidad: tienen el poder de hacer brotar una mullida alfombra vegetal, y de hacer nacer de ella diversas plantas, flores y árboles de variadas especies.”

“Magia y Secretos de la Mujer Mapuche, Sexualidad y Sabiduría Ancestral”
Ziley Mora (2007)



El análisis de la filosofía mapuche de Ziley Mora, radica en la capacidad de descomponer los elementos “propios culturales” recogidos del habla mapuche, como engranaje socio – lingüístico de su pensamiento, bajo una mirada dialéctica de cada partícula conceptual, de las características, tanto asexuadas como femeninas, basado en un presupuesto dual, cultural e interpretativo, en el cual las partes antagónicas organizadas en narrativas opuestas, el hombre y la mujer, el sexo y la guerra, explican su funcionalidad mutua.

En este sentido, Mora, duplica el intercambio negado del antagonismo sexual, llevándolo a una suma de acontecimientos sexualizados, otredad del vacío intertextual bajo la mirada androcéntrica del hombre arcaico, que aparece saturada de sentido en el coito de la experiencia interpretativa. Es aquí en donde se enmarca mi lectura de la interpretación de la sexualidad en la cultura mapuche, ya que es en esa asexualidad romántica de lo femenino como origen negado, donde se organiza la definición de lo masculino, una vez que esconde las claves según opera la interpretación de la sexualidad “otra”.

La funcionalidad explicativa de dicho “contenido cultural” aparece doblegada en el sensualismo de las formas de la dominación, inherentes a la interpretación del otro sexual, como agregado obsceno que reconoce a ese otro del otro sensual femenino, como continuidad ausente del intercambio en la mirada masculina, que Ziley define como reflejo o teñido de la mujer, equivalente a la victoria en el derecho del hombre, que incorpora la virtud, negando la forma particular de lo femenino, a partir de la visibilización de una magia trascendental secreta, escencializando la forma femenina en el simbolismo universal, que define a lo masculino como significante, tanto desde la historia como del poder.

Bourdieu plantea en este sentido que “la visión androcéntrica se impone como neutra y no siente necesidad de enunciarse en unos discursos capaces de legitimarla”, lo femenino en la interpretación androcéntrica, es el hombre narrado como lo femenino, la verdad del hombre como la negación de la negación de lo femenino, que expone la enunciación de la mujer bajo la posibilidad histérica o bajo la forma explicativa antropológico mágica.

Que la sexualidad de la mujer sólo aparezca una vez que ha sido negada, explica que ante su ausencia tengamos una interpretación femenina del mundo, lo que a su vez permite y concede en dicha virtud el poder a los hombres. El vacío o concavidad fecunda que organiza los destinos del hombre interpelan la construcción de la segunda naturaleza de la mujer, como núcleo libidinal del hombre, proyectado en el registro de la sexualidad femenina puesta en la historia como interpretación, lo que en el ambiente académico se denomina “construcción de género”, aparece aquí como forma sacralizada de cultura, intitulada como “el amor y la sexualidad en la cultura mapuche”.

La discriminación simbólica que define a una cultura, como escenario naturalizado de aquella segunda naturaleza, como un -lo otro- supuestamente liberado en la espacialidad, y narrado por la interpretación histórica de ésta, circunscribe al antagonismo cultural en un doble antagonismo, sexual y cultural.

La sexualidad mapuche y la posesión del guerrero, explica en el análisis antropológico la materialidad de la mujer, y la paradójica hazaña del hombre. La mujer preñada por ejemplo, aparece oculta ante la tribu generando sobre la base de dicha invisibilidad los lazos mágicos que construyen la vida del hombre.

El platonismo de Ziley define a la sexualidad de la mujer a partir de la sujeción de esta al hombre, la mujer sólo aparece en la medida en que es invisible, como hazaña completa, en el correlato de orden económico de la guerra y la ganancia, que justifica la posesión sexual como pura interpretación, como acontecimiento estético, la nauseas y el dolor al parir abren las puertas de su propia clausura, como función explicativa de la hipnosis de la dominación patriarcal, esto es, en tanto naturalización del silencio, en el tabú y la manifestación histérica de la posibilidad femenina como operación negada.

Es interesante que el lugar negado de las prácticas sexuales de la cultura mapuche, hayan su origen en el lugar carente de interpretación, el lugar silenciado como explicación actúa como el síntoma, lo negado aquí define a la hazaña, la “nada del otro” actúa como la interpretación misma en tanto origen, en la recreación de la forma cultural que organiza la dualidad en la economía de la guerra a través de la economía sexual de los cuerpos, transfiguración mágica que define a la victoria del hombre.

En un pasaje (2) Ziley Mora, describe como Calfucura lleva a sus treintitres esposas a una montaña mientras el va a la guerra, dicho acto le permitiría al guerrero conquistar la victoria, la ausencia de sus mujeres supone por un lado un mundo material absoluto, consecuente con el “inmanentismo religioso” del mapuche kimün, pero volcado al infinito bajo la fórmula fenomenal absoluta, negando el registro o huella de la experiencia bajo el supuesto de parir la victoria. Invisibilidad del símbolo, reificado de la condición material de la mujer, según la propia virtud dual visible/invisible del guerrero.

Es así como la ganancia del guerrero es la racionalidad sublimada de la dominación masculina, que define la sexualidad de la mujer a partir de su invisivilización explicativa del mundo, metamorfosis de todos los lugares en el no lugar de la experiencia, que es lo que en definitiva le da el poder sobre el mundo material e inmaterial.


Notas:

(1) Resumen del trabajo y análsis crítico del texto "Amor y Sexualidad en la Cultura Mapuche" de Ziley Mora, parte de mi exposición para el I Congreso Interdisciplinario sobre Género y Violencia.
(2) Mora, Ziley "Amor y Sexualidad en la Cultura Mapuche" en www.dibam.cl

Perú: Agravio a congresista indígena por no escribir bien

Por: Zoraida Portillo/SEMlac
Una congresista indígena fue agredida por un diario peruano por no saber escribir bien el castellano. Sin embargo, lo que pretendió ser un acto de 'denuncia' periodística terminó develando el profundo racismo y menosprecio por las culturas autóctonas que existen en ciertos sectores de la sociedad y concitando el rechazo de políticos, intelectuales y pobladores.

El jueves 23 de abril, el diario Correo publicó en portada varias fotos de la congresista Hilaria Supa, mostrando anotaciones de su puño y letra con faltas evidentes de ortografía y sintaxis y puso como título: "¡Qué nivel!, urge Coquito (en relación al libro con que se enseña a leer y escribir en educación inicial) para congresista Supa".

Pero contrariamente a la 'solidaridad' que el director del diario Correo, vinculado a la ultraderecha, pensó encontrar en otros sectores, por el hecho de que alguien semi analfabeto sea congresista, su artículo desató una serie de protestas de prácticamente todos los sectores de la sociedad civil.


El pleno del Congreso, luego de poco más de dos horas de debate, aprobó un comunicado en el que afirma que la información "trasluce una actitud discriminatoria" y evalúa acciones en el plano legal.

Por su parte, la Mesa contra el Racismo de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, anunció su intención de solicitar formalmente la tipificación del delito de racismo dentro del Código Penal, para evitar este tipo de excesos por parte de la prensa.

Sin embargo, Aldo Mariátegui, director de Correo, dijo que no se retractará de la información porque no es posible que a un cargo de tanta importancia y por el que se percibe uno de los sueldos más altos del estado peruano, puedan acceder personas que no pueden expresarse bien en castellano.

"Es una preocupación legítima por mejorar el nivel del congreso… lo mínimo es que (los congresistas) tengan nivel universitario que permita contar con un buen congreso", acotó en su defensa.

Curiosamente, Mariátegui —reconocido ideólogo de la ultraderecha peruana— es nieto de José Carlos Mariátegui, el indigenista y fundador del Partido Comunista Peruano y uno de los íconos para los sectores de izquierda y populares del país.

Supa es una mujer autodidacta y quechua-hablante, procedente de una provincia del Cusco, que recién aprendió a leer y escribir a los 28 años. Asiste a las reuniones del parlamento con su vestimenta andina tradicional.

Según ha relatado en su libro "Los Hilos de mi Vida", editado en inglés y alemán, y próximamente en quechua, las mujeres campesinas estaban prohibidas de estudiar porque los hacendados las necesitaban a su servicio y veían a la educación como sinónimo de sindicato.

Ella aprendió el castellano por sus propios medios, "pero lo entiendo perfectamente", ha acotado.

En su intervención ante el congreso, luego de la agresión periodística, Supa dijo que ella no se humilla ante nadie. "Yo estoy orgullosa de donde vengo y de ser lo que soy, así que desde ahora solo hablaré en quechua", advirtió.

Posteriormente, en declaraciones a la prensa, explicó que esta decisión la tomó debido a que así como a ella se la obliga a hablar y escribir perfectamente en español, también debería hacerse lo propio con el resto de congresistas respecto del quechua. Cabe anotar que el quechua es también un idioma oficial del Perú.

Por su parte, reputados intelectuales han señalado que el pedido de Mariátegui, sobre el nivel educativo superior de los congresistas, resulta antidemocrático y contra las tendencias actuales en el mundo.

"Precisamente, una de las características de la democracia es que sus representantes procedan de diversas vertientes de la sociedad, y por eso no se exige un grado de instrucción más allá de saber leer y escribir", recordó el constitucionalista Enrique Bernales en declaraciones a SEMlac.

La escritora y lingüista Rocío Silva-Santisteban, quien además tiene una maestría en género, se pregunta en su columna de los domingos en el diario La República "¿puede un congresista ser analfabeto?"

Y se responde: "Perfectamente, porque un congresista no es un profesor universitario ni un periodista de prensa escrita, es un representante popular que es votado y escogido por diferentes características y no necesariamente se requiere ser letrado para ser líder o para estar informado, mucho menos para ser un luchador social".

Por su parte, el abogado y antropólogo Antonio Peña, en declaraciones al diario El Comercio, señaló que la publicación revela discriminación, racismo e incomprensión de la diversidad cultural del Perú.

"El racismo tiene una connotación política de entender que hay un grupo superior sobre otro: pensar que el que no habla castellano, no es un buen ciudadano", afirmó.

El sábado 25, diversas organizaciones de la sociedad civil y ciudadanos de a pie se congregaron frente a las puertas del matutino, para exigir una rectificación de su director, pero el mitin no mereció una línea en la edición dominical del diario.

miércoles, abril 29, 2009

Television Británica censura anuncio contra la Violencia de Género


En el Reino Unido han censurado este spot contra la violencia de género. Seguramente las imágenes pueden resultar muy crudas a la mayoría, sin embargo, lo que aquí se plasma es sólo una pequeña parte de la REALIDAD que desgraciadamente han de vivir miles de mujeres en todo el mundo. Una realidad que con total seguridad es mucho más dura aún de lo que podemos ver en este corto, y que en tal sentido, debe destacarse que a veces puede resultar justificable este tipo de campañas, pues al parecer, muchas veces es dificil que algunos e incluso algunas nos sensibilicemos ante esta cruda realidad.

Según declaraciones de los representantes de “Clearcast” (el organismo regulador de la publicidad en Reino Unido) cuando exigieron recortar las imágenes más duras del anuncio, indicando que si no se hacía de este modo no permitirían la emisión de tan “polémico” spot: “Resulta demasiado violento e impactante para el público”, lo que para algunos sectores críticos no por esconderla va a existir en menor medida, o va a dejar de existir...

María del Mar, una vida en defensa de la mujer

Por: Enrique Torres/Prensa Latina
Los sueños de la veterana luchadora por los derechos de la mujer Maria del Mar Alvarez se abren camino con la Revolución Bolivariana, batallando contra prejuicios que como hierba mala tratan de subsistir. "Soy comunista desde el año 1950, era miembro de la juventud comunista y luchaba a favor de la emancipación de las mujeres", expresó Alvarez en entrevista con Prensa Latina.

Rememoró sus primeras actividades en la Asociación de Muchachas Venezolanas, agrupación que si bien abogaba por los derechos de la mujer, también cumplía un rol político, ya que era parte de la lucha contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, quien gobernó de 1952 a 1958.

"La vida monogámica patriarcal es resultado de relaciones de producción capitalistas, que tratamos de transformar, pero que aún, sin querer, persisten diferencias en el hogar en el trato al niño y en el trato a la niña, en los juguetitos, por ejemplo"...
"En el socialismo las condiciones mejoran y van mejorando económicamente y van incorporando a las mujeres a una vida distinta, no llena de pobreza como estuvieron, no estar en la escala de la mayor pobreza que existe, entre los pobres la mujer fue la más pobre", enfatizó.

Entre las casi 300 venezolanas que este fin de semana analizaron aquí alternativas para hacer frente a la crisis global, sobresalió esta activista, quien pese a los avatares de su vida, aseguró conservar energías para seguir luchando en defensa de sus congéneres.

Con nítida voz, en una de las mesas de trabajo del cónclave, exhortó a sus compatriotas a rebasar los logros institucionales del proceso bolivariano, que abrieron las puertas para el desarrollo de las féminas, pero que de la noche a la mañana no logran vencer los estereotipos que subsisten.

Alvarez quedó viuda en 1965 tras la muerte del dirigente revolucionario Alberto Lovera, asesinado por fuerzas de la Dirección General de Policía durante el gobierno del presidente Raúl Leoni.

Luego de un largo peregrinaje por varias comisarías de Caracas, seis meses después de haber desaparecido Lovera, su esposa llegó al estado Anzoátegui. El cuerpo había sido encontrado en las playas de Lechería, en ese territorio. Las evidencias mostraban que fue privado de la vida luego de ser torturado.

Si bien su activismo político y a favor de la mujer ganó fuerza luego de esos sucesos, recordó que su accionar a favor de las mujeres comenzó desde mucho antes del crimen.

"El trabajo con las mujeres -subrayó- siempre lo vinculamos a sus reivindicaciones, para que interiorizaran que existía la discriminación".

La veterana luchadora consideró que las venezolanas se sienten hoy orgullosas de poder contar con un ministerio que atiende los asuntos de la mujer.

"En Venezuela hoy en día existe una igualdad jurídica de la mujer, establecida en la constitución, y existe una preocupación de las mujeres por aspirar, pero no podemos decir que esas conquistas jurídicas que hoy tenemos estén plenamente asimiladas por todas las mujeres", comentó.

En su opinión es clave que las venezolanas asimilen bien estos conceptos para que logren persuadir a los hombres.

"La vida monogámica patriarcal es resultado de relaciones de producción capitalistas, que tratamos de transformar, pero que aún, sin querer, persisten diferencias en el hogar en el trato al niño y en el trato a la niña, en los juguetitos, por ejemplo", acotó.

De acuerdo con Alvarez, a las pequeñas se les regalan cocinitas, planchitas, y al hombre su carrito y su avioncito, y así a las hembras se les va preparando para que cuide a los hijos y su mente se adapte a los roles que les espera en el hogar.

"Con el proceso revolucionario emprendido por el presidente Hugo Chávez la mujer que ha salido a la calle a trabajar, sin embargo en muchos casos, sigue pensando que es responsable también del trabajo doméstico, y tiene que organizarlo y responder por este, y no que el hombre y la mujer deben responder de conjunto, como debe ser", indicó.

En este sentido, reflexionó sobre el vínculo existente entre el estado de abandono en el cual durante décadas vivieron las mujeres aquí y su condición económica.

"En el socialismo las condiciones mejoran y van mejorando económicamente y van incorporando a las mujeres a una vida distinta, no llena de pobreza como estuvieron, no estar en la escala de la mayor pobreza que existe, entre los pobres la mujer fue la más pobre", enfatizó.

En la actualidad, Alvarez imparte clases en un ciclo de charlas organizado por el Centro de Estudios de la Mujer de la Universidad Central de Venezuela, y según reveló a Prensa Latina, escribe un libro sobre el controversial tema, en el cual trata de sintetizar la información y la experiencia acumulada durante años.

"El libro, es una deuda con mis compatriotas", concluyó.

Consideran privilegiada la situación de la mujer cubana en América Latina

"Sin la mujer, la obra de la Revolución no hubiera sido posible". FIDEL CASTRO

A pesar de que el "machismo" aún está presente y de que no se puede decir que se haya alcanzado la completa emancipación, la especialista en estudios de género, María Guerra, aseguró la víspera que la situación de vida de las mujeres cubanas y el respeto a su dignidad, no tiene comparación con el resto de los países de América Latina.

Así lo puntualizó al participar en la mesa "Las mujeres cubanas a 50 años de la Revolución", que se llevó a cabo en la Casa de las Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), con los comentarios de Tamara Barra, integrante del movimiento mexicano de solidaridad con Cuba; Vivian Martínez, agregada cultural de la Embajada de Cuba en México; y la moderadora Ana Esther Ceceña.

El foro, organizado por la Red de intelectuales y artistas en defensa de la Humanidad, estuvo dedicado a Vilma Espín, un personaje fundamental en el impulso de la lucha de las mujeres al crear la Federación de Mujeres Cubanas.

María Guerra, profesora de la UNAM y académica del Posgrado de Estudios Latinoamericanos, recordó que desde las primeras décadas que siguieron a 1959, año en que se realizó la Revolución Cubana, el trabajo creador de mujeres y hombres logró forjar una democracia socialista y una práctica internacionalista.

"El llamado periodo especial (1992-1995), tras el derrumbe del socialismo y el cese de la ayuda que les brindaba la Unión Soviética, llegó a poner en riesgo muchos de los logros alcanzados hasta entonces. Dentro de este proceso, el papel protagónico de las mujeres ha sido fundamental.

"Cuba ha logrado una situación que no tiene precedentes en América Latina porque los beneficios han sido alcanzados por todas ellas y no sólo por una clase o una elite, y se resumen en el respeto y autoridad que tienen hoy las mujeres frente a la sociedad", expresó la investigadora.

Guerra ofreció algunas cifras para ejemplificar el grado de los avances obtenidos por las mujeres en la Cuba Revolucionaria. Dijo que antes de 1959 las mujeres no participaban de la economía agrícola ni en las labores de artesanía, como sucede en otros países del continente. Además, una ideología patriarcal dominante impedía su incorporación en tareas que no fueran del ámbito doméstico.

Indicó que las mujeres conformaban el 13 por ciento de la población económicamente activa en 1953 y miles de ellas trabajaban en el comercio y los servicios; mientras que el 84 por ciento eran amas de casa.

Destacó el hecho de que los índices de mortalidad infantil, desempleo y analfabetismo en la Cuba de Fulgencio Batista eran de los más altos en América Latina.

"Esta situación creó las condiciones para el surgimiento de un movimiento revolucionario que se había venido gestando años atrás. A pesar de esa nula participación de las mujeres en la vida social, laboral y educativa, ellas tuvieron una importante participación política al lado de quienes integraron el llamado movimiento 26 de Julio, varias mujeres desempeñaron un papel heroico en la lucha contra la dictadura", expresó.

Sin embargo, precisó que la experiencia Cubana demuestra que la desaparición del capitalismo no implica la desaparición automática de la discriminación de género, pues el nuevo papel de las mujeres trastocó los antiguos roles y generó contradicciones al interior de las relaciones de familia y de pareja.

"Hay problemas que aún no se resuelven, es difícil erradicar y modificar actitudes mentales ideológicas y características culturales que se trasmiten de una generación a otra.

"No obstante, en la educación superior la presencia de las mujeres revela cambios sustanciales. En 1988, de 30 mil graduados, el 55 por ciento eran mujeres. Lo importante es que las mujeres se integran a áreas a las cuales nunca antes lo habían hecho, como carreras agropecuarias, de ingeniería, mecánica, etcétera", ejemplificó.

Por ello, aseguró, lo que la Revolución Cubana ha dado a las mujeres, a pesar de las fallas o errores, no tiene ninguna comparación con lo que se vive en nuestro país.

"Hay una cita de Fidel Castro que pronunció con motivo de la celebración del 8 de marzo de 1997, que dice: sin la mujer, la obra de la Revolución no hubiera sido posible", afirmó.

Y continuó "a lo largo de estos años difíciles no ha habido tarea económica, social o política, no ha habido logro científico, cultural o deportivo, no ha habido aporte a la defensa de nuestro pueblo y a la soberanía de nuestra patria en la que no halla contado con la presencia invaluablemente entusiasta y patriótica de la mujer cubana. Nadie como ella ha hecho los mayores sacrificios en el periodo especial que estamos aún viviendo y se ha empeñado tanto hasta convertir su hazaña en esfuerzo cotidiano".

La viuda mexicana de los Mártires de Chicago

Por: Raúl Lescas Jiménez
Capítulo IX, la viuda mexicana de los Mártires de Chicago
Del libro: Historia del 1° de Mayo (en prensa)

Somos las esclavas de los esclavos.
Nos explotan más despiadadamente que a los hombres.
(Lucy González de Parsons, 27 de junio de 1905).


¿Lucy González de Parsons?, ¡ah!.. sí... es: “... una mulata que no llora”, subrayó en el papel, José Martí, el grande de Nuestra América, quien se encontraba en Nueva York el 2 de septiembre de 1886, y se enteró de los sucesos de Haymarket Square (La Plaza del Heno); tomó su pluma y la describió en una carta al diario La Nación de Buenos Aires, Argentina.

Después, quizá sin saber que esa “mulata” era de madre mexicana, se detuvo para ver porqué de los ojos de Lucy no escurrían lágrimas, cuando el Gran Jurado estadunidense, condenó a morir en la horca a su fiel compañero, Alberto Richard Parsons, uno de los ocho Mártires de Chicago.

Cuando en la sala se escuchó el veredicto de: “¡Culpables!”... ¡Morirán en la horca el próximo 11 de noviembre de 1887!, la mexicana sintió como un nudo le ahorcaba su débil garganta, pero sin hacer gestos en su cara, tragó saliva y se contuvo para no derramar lágrimas que mojaran sus pequeños ojos ante los verdugos... solo apretó el rostro contra su puño cerrado.

Tomó los cordones de una cortina, los amarró como un nudo de la ahorca y los arrojó por la ventana, para que los obreros concentrados en la plaza que cercaba al tribunal, entendieran el castigo que los capitanes de la industria le imponían a los que lucharon por reducir la jornada laboral a 8 horas.

Alberto Parsons la miró fijo y, se acordó aquel lejano día cuando la conoció en los campos algodoneros de Austin, Texas. Entonces, Lucy quizá era esclava de los racistas hacendados tejanos, quienes habían incitado a la Unión Americana a declararle la guerra a México, con tal de adueñarse de la frontera norte del México recién independizado de la Corona española.

Estados Unidos de América como se autonombraron, se expandía a caballo de la industrialización, el exterminio de las tribus nativas, entre ellos, el padre de Lucy, quien al parecer fue un indio Creek y, el arrebato de la mitad del territorio mexicano, una de cuyas víctimas fue la madre de Lucy.

La mente mulata de Lucy se cimbró con el recuerdo, que como un rayo, le trajo las imágenes del 1° de Mayo de 1886, cuando su corazón saltaba dentro del pecho al ver a los miles y miles de huelguistas que se aprestaban a movilizarse y llevó a sus pequeños hijos al desfile del Primero de Mayo; tomada de la mano de su querido Alberto, gritaba: “no queremos trabajar más de 8 horas”.

Su pequeña hija, Lulú, de escasos 8 años y, Albertito de 7, cantaban y gritaban consignas que se expandían como rocío por el pasto verde que acompaña el borde del gran lago de la ciudad industrial de Chicago, ese tocinero de mundo, aquel estibador de trigo y ¡el faquín de la Nación!, como diría el poeta Carl Sanburg.

Los Parsons nunca se imaginaron que año tras año, como los peces en la pecera, los obreros del mundo harían el mismo recorrido de Lucy, Alberto, Lulú y Albertito, ya no por el Lago Font, sino por las calles del mundo.

Muchos años antes, la familia Parsons habían emigrado desde el sur acosados por la segregación racial tejana y, se habían cobijado en la frontera norte, por el rumbo de Canadá, en la ciudad de Chicago, donde el Movimiento Obrero se organizaba tenazmente para declarar una huelga general en pro de la jornada laboral de 8 horas.

Fue el 1° de Mayo de 1886, cuando los obreros de Norteamérica decidieron tomar en sus manos sus destinos y rescribir la Historia que había arrancado cuando la inglesa Revolución industrial había atracado en el puerto de Nueva York.

Pero aquel día, 2 de septiembre, José Martí no apartaba la vista de la ventana neoyorquina, ni le temblaba la mano, cuando describió la sentencia del “Honorable” Juez:

“Allí la mulata de Parsons –refiriéndose a la mexicana Lucy González–, implacable e inteligente como él (Alberto R. Parsons), que no pestañea en los mayores aprietos, que habla con feroz energía en las juntas públicas, que no se desmaya como las demás, que no mueve un músculo del rostro cuando oye la sentencia fiera. Los noticieros de los diarios se le acercan, más para tener qué decir que para consolarla. Ella aprieta el rostro contra su puño cerrado.

“No mira; no responde; se le nota en el puño un temblor creciente; se pone en pie de súbito, aparta con un ademán a los que la rodean, y va a hablar de la apelación con su cuñado.”.

La escena no pudo ser más dramática, mientras soplaba el viento helado en la plaza de Chicago.

Pero Martí, impide que se le interrumpa y sigue relatando:

“La viejita ha caído en tierra (la madre de Augusto Spies). A la novia infeliz se la llevan en brazos (Nina Van Zandt). (Lucy) Parsons se entretenía mientras leían el veredicto en imitar con los cordones de una cortina que tenían el nudo de la horca, y en echarlo por fuera de la ventana, para que lo viese la muchedumbre de la plaza.

“La plaza, llena desde el alba de tantos policías como concurrentes, hubo gran conmoción cuando se vio salir del tribunal, como si fuera montado en un relámpago, el cronista de un diario, –el primero de todos. Volaba. Pedía por merced que no lo detuviesen. Saltó al carruaje que lo estaba esperando.

“–‘¿Cuál es, cuál es el veredicto?’ –voceaban por todas partes.– ‘¡Culpables!’ – dijo ya en marcha. Un hurra, ¡triste hurra!, llenó la plaza. Y cuando salió el juez, lo saludaron.”

Los sindicalistas de Chicago, entonces, desfilaron a la horca el 11 de noviembre de 1887 y se convirtieron en los Mártires de Chicago y, Lucy González de Parsons, en su viuda mexicana.

Lucía Eldine González nació en 1853 en Johnson County, Texas, es decir, a los pocos años en que este Estado pasó a formar parte de la Unión Americana, tras declarar su “Independencia” de México y la posterior Guerra de Intervención estadunidense en 1847, así como la firma de los Tratados de Guadalupe Hidalgo el 2 de febrero de 1848 (mediante el cual México cedió a los invasores más de la mitad de su territorio).

Y no eran pocos los mexicanos que vivían en Texas en la transición a su asimilación a los Estados Unidos. Los investigadores calcularon, con base a datos oficiales, que en 1860, sumaban las 19 mil 293 personas, aunque alertaron que era muy difícil saber con exactitud el número de mexicanos por la forma en que los gringos los contaban (“Los nativos de México, de padres mexicanos, no eran enlistados por separado. Por tanto, este sector de mexicanos es desconocido.”).

Pero Lucy Parsons, como se le conocía en el movimiento sindical, se consideraba “mexicana” y sus adversarios y enemigos se referían a ella como una “mujer de color”.

De Lucy se conoce poco de sus años mozos, pero sus biógrafos recuerdan que ella solía decir que era hija de una mexicana (probablemente María del Carmen) y de un indio Creek (quizá de nombre Jhon Waller) y, que a los tres años de edad quedó huérfana, por lo que un tío maternal la crió en un rancho de Texas. Joe Lowndes dice que una reciente investigación arrojó el dato de que probablemente Lucy estuvo esclavizada en ese rancho tejano.

El historiador James D. Cockcroft la definió como “una mujer hispano hablante de mezcla India-Africana-Mexicana, es conocido mundialmente que fue una activista obrera toda su vida.”



Homenaje a Lucy González de Parsons

La viuda mexicana de los Mártires de Chicago

Por Raúl Lescas Jiménez
Capítulo IX. Lucy González de Parsons, la viuda mexicana de los Mártires de Chicago
Del libro: Historia del 1° de Mayo (en prensa).
Escuela Nacional para Trabajadores, plantel Morelia, México, 8 de marzo de 2004



Somos las esclavas de los esclavos.
Nos explotan más despiadadamente que a los hombres.
(Lucy González de Parsons, 27 de junio de 1905).

Lucy González de Parsons, una mexicana en Chicago

¿Lucy González de Parsons?, ¡ah!.. sí... es: “... una mulata que no llora”, subrayó en el papel, José Martí, el grande de Nuestra América, quien se encontraba en Nueva York el 2 de septiembre de 1886, y se enteró de los sucesos de Haymarket Square (La Plaza del Heno); tomó su pluma y la describió en una carta al diario La Nación de Buenos Aires, Argentina.[1]

Después, quizá sin saber que esa “mulata” era de madre mexicana, se detuvo para ver porqué de los ojos de Lucy no escurrían lágrimas, cuando el Gran Jurado estadunidense, condenó a morir en la horca a su fiel compañero, Alberto Richard Parsons, uno de los ocho Mártires de Chicago.

Cuando en la sala se escuchó el veredicto de: “¡Culpables!”... ¡Morirán en la horca el próximo 11 de noviembre de 1887!, la mexicana sintió como un nudo le ahorcaba su débil garganta, pero sin hacer gestos en su cara, tragó saliva y se contuvo para no derramar lágrimas que mojaran sus pequeños ojos ante los verdugos... solo apretó el rostro contra su puño cerrado.

Tomó los cordones de una cortina, los amarró como un nudo de la ahorca y los arrojó por la ventana, para que los obreros concentrados en la plaza que cercaba al tribunal, entendieran el castigo que los capitanes de la industria le imponían a los que lucharon por reducir la jornada laboral a 8 horas.

Alberto Parsons la miró fijo y, se acordó aquel lejano día cuando la conoció en los campos algodoneros de Austin, Texas. Entonces, Lucy quizá era esclava de los racistas hacendados tejanos, quienes habían incitado a la Unión Americana a declararle la guerra a México, con tal de adueñarse de la frontera norte del México recién independizado de la Corona española.

Estados Unidos de América como se autonombraron, se expandía a caballo de la industrialización, el exterminio de las tribus nativas, entre ellos, el padre de Lucy, quien al parecer fue un indio Creek y, el arrebato de la mitad del territorio mexicano, una de cuyas víctimas fue la madre de Lucy.

La mente mulata de Lucy se cimbró con el recuerdo, que como un rayo, le trajo las imágenes del 1° de Mayo de 1886, cuando su corazón saltaba dentro del pecho al ver a los miles y miles de huelguistas que se aprestaban a movilizarse y llevó a sus pequeños hijos al desfile del Primero de Mayo; tomada de la mano de su querido Alberto, gritaba: “no queremos trabajar más de 8 horas”.

Su pequeña hija, Lulú, de escasos 8 años y, Albertito de 7, cantaban y gritaban consignas que se expandían como rocío por el pasto verde que acompaña el borde del gran lago de la ciudad industrial de Chicago, ese tocinero de mundo, aquel estibador de trigo y ¡el faquín de la Nación!, como diría el poeta Carl Sanburg.

Los Parsons nunca se imaginaron que año tras año, como los peces en la pecera, los obreros del mundo harían el mismo recorrido de Lucy, Alberto, Lulú y Albertito, ya no por el Lago Font, sino por las calles del mundo.

Muchos años antes, la familia Parsons habían emigrado desde el sur acosados por la segregación racial tejana y, se habían cobijado en la frontera norte, por el rumbo de Canadá, en la ciudad de Chicago, donde el Movimiento Obrero se organizaba tenazmente para declarar una huelga general en pro de la jornada laboral de 8 horas.

Fue el 1° de Mayo de 1886, cuando los obreros de Norteamérica decidieron tomar en sus manos sus destinos y rescribir la Historia que había arrancado cuando la inglesa Revolución industrial había atracado en el puerto de Nueva York.

Pero aquel día, 2 de septiembre, José Martí no apartaba la vista de la ventana neoyorquina, ni le temblaba la mano, cuando describió la sentencia del “Honorable” Juez:

“Allí la mulata de Parsons –refiriéndose a la mexicana Lucy González–, implacable e inteligente como él (Alberto R. Parsons), que no pestañea en los mayores aprietos, que habla con feroz energía en las juntas públicas, que no se desmaya como las demás, que no mueve un músculo del rostro cuando oye la sentencia fiera. Los noticieros de los diarios se le acercan, más para tener qué decir que para consolarla. Ella aprieta el rostro contra su puño cerrado.

“No mira; no responde; se le nota en el puño un temblor creciente; se pone en pie de súbito, aparta con un ademán a los que la rodean, y va a hablar de la apelación con su cuñado.”.

La escena no pudo ser más dramática, mientras soplaba el viento helado en la plaza de Chicago.

Pero Martí, impide que se le interrumpa y sigue relatando:

“La viejita ha caído en tierra (la madre de Augusto Spies). A la novia infeliz se la llevan en brazos (Nina Van Zandt). (Lucy) Parsons se entretenía mientras leían el veredicto en imitar con los cordones de una cortina que tenían el nudo de la horca, y en echarlo por fuera de la ventana, para que lo viese la muchedumbre de la plaza.[2]

“La plaza, llena desde el alba de tantos policías como concurrentes, hubo gran conmoción cuando se vio salir del tribunal, como si fuera montado en un relámpago, el cronista de un diario, –el primero de todos. Volaba. Pedía por merced que no lo detuviesen. Saltó al carruaje que lo estaba esperando.

“–‘¿Cuál es, cuál es el veredicto?’ –voceaban por todas partes.– ‘¡Culpables!’ – dijo ya en marcha. Un hurra, ¡triste hurra!, llenó la plaza. Y cuando salió el juez, lo saludaron.”.[3]

Los sindicalistas de Chicago, entonces, desfilaron a la horca el 11 de noviembre de 1887 y se convirtieron en los Mártires de Chicago y, Lucy González de Parsons, en su viuda mexicana.

Lucía Eldine González nació en 1853 en Johnson County, Texas, es decir, a los pocos años en que este Estado pasó a formar parte de la Unión Americana, tras declarar su “Independencia” de México y la posterior Guerra de Intervención estadunidense en 1847, así como la firma de los Tratados de Guadalupe Hidalgo el 2 de febrero de 1848 (mediante el cual México cedió a los invasores más de la mitad de su territorio).

Y no eran pocos los mexicanos que vivían en Texas en la transición a su asimilación a los Estados Unidos. Los investigadores calcularon, con base a datos oficiales, que en 1860, sumaban las 19 mil 293 personas, aunque alertaron que era muy difícil saber con exactitud el número de mexicanos por la forma en que los gringos los contaban (“Los nativos de México, de padres mexicanos, no eran enlistados por separado. Por tanto, este sector de mexicanos es desconocido.”).[4]

Pero Lucy Parsons, como se le conocía en el movimiento sindical, se consideraba “mexicana” y sus adversarios y enemigos se referían a ella como una “mujer de color”.[5]

De Lucy se conoce poco de sus años mozos, pero sus biógrafos recuerdan que ella solía decir que era hija de una mexicana (probablemente María del Carmen) y de un indio Creek[6] (quizá de nombre Jhon Waller) y, que a los tres años de edad quedó huérfana, por lo que un tío maternal la crió en un rancho de Texas. Joe Lowndes dice que una reciente investigación arrojó el dato de que probablemente Lucy estuvo esclavizada en ese rancho tejano.[7]

El historiador James D. Cockcroft la definió como “una mujer hispano hablante de mezcla India-Africana-Mexicana, es conocido mundialmente que fue una activista obrera toda su vida.”.[8]

Según una investigadora del movimiento feministas chicano, “En 1848, año en que se presenta en Seneca Falls la ‘Declaración de Sentimientos’ por las sufragistas Elizabeth Cady Stanton y Lucrecia Mott, las México-americanas comenzaban a incorporarse al territorio anexado a Estados Unidos luego de la colonización, y este período es uno de liberación de los chicanos por su tierra.” Lucy se habría integrado años después a este movimiento de las mujeres trabajadoras, ya que “mantuvo contacto con el sufragismo al igual que Emma Goldman, atraídas por las líderes Jane Addams y Florence Kelley, quienes estaban resueltas a encontrar mejores condiciones para las trabajadoras inmigrantes (Cotera, 1980, p. 224)

Los historiadores del Movimiento Obrero Chicago, la miraron de la siguiente manera: “Ejemplo de una oposición al capitalismo más ideológicamente orientada fue el de la mexicana Lucy González Parsons, que comenzó como anarquista para convertirse en socialista y comunista. Lucy Parsons, mexicano-tejana, alcanzó fama nacional debido a sus esfuerzos por salvar la vida de su marido y de los mártires anarquistas de Haymarket en 1886. Todavía en el siglo XX, siguió siendo una figura clave de los Obreros Industriales del Mundo (IWW) y de los partidos socialistas y comunistas de Estados Unidos.”.

A fines del siglo XIX, el cordón algodonero de San Antonio y Austin (Texas) rivalizaban con el Valle del Río Grande a “lo largo de la frontera, por lo que toca a número de mexicanos residentes. Fue ahí, en Austin, donde Lucy conoció a Alberto Richard Parsons, con el cual se casó en 1871 o 1872 y, años después, procreó dos hijos (Lulú y Alberto Jr.).

Como Parsons era un republicano radical, y su recién fundada familia una mezcla de razas, los tejanos lo obligaron a emigrar.

Con las escasas pertenencias y las maletas en la mano, la familia Parsons se trasladó a la ciudad industrial de Chicago en 1873; ahí Lucy abrió una pequeña tienda de ropa quizá por su afición a los campos de algodón y el trabajo de las costureras, para ayudar a la economía del hogar, mientras que Alberto laboraba en un taller de impresión, una vocación que llevaba a flor de piel.

Lucy no sólo tenía cualidades de organizadora y buena ama de casa, le tomó gusto a la lectura y empezó a redactar artículos sobre temas diversos en 1878 (sobre los sin techo, los desocupados, los vagabundos, sobre los veteranos de la Guerra Civil y, referentes al papel de las mujeres en la construcción del socialista).

Más adelante, ayudó a fundar la Unión de Mujeres Trabajadoras de Chicago, que en 1882, Los Caballeros del Trabajo la reconocieron y la sumaron a sus filas (en esos años no se permitía la militancia de las mujeres en las organizaciones). Asimismo, participó de la fundación de la Internacional Working People’s Asociation (IWPA), una organización de ideas anarquistas que promovían la “Acción Directa” contra los capitalistas.

En 1885, en plena efervescencia por la jornada de 8 horas, Lucy fue una mujer muy activa en la organización de las costureras de la industria maquiladora (sweat-shops).

Colaboraba con artículos para el periódico La Alarma, que editaba su compañero Alberto R. Parsons.

Desde esa tribuna, hizo hincapié en la defensa de los negros. En un artículo publicado el 3 de abril de 1886, denunció que los negros eran victimas sólo porque eran pobres, y planteó que el racismo desaparecería inevitable con la destrucción del capitalismo.

Durante las movilizaciones de mayo de 1886, acompañó al movimiento obrero desde el primer día. El 1° de Mayo, tomada de la mano de Alberto y sus hijos, desfiló altiva y orgullosa de pertenecer a la clase obrera industrial.

Durante los sucesos de Haymarket del 4 de mayo, junto a sus pequeños Lulú y Albertito, y su esposo, estuvo en el Salón Zept’s, por lo que nada tuvieron que ver ni ella ni su esposo, en el lanzamiento de la bomba que mató al policía Degan, razón por la cual se inculpó a los Mártires de Chicago a morir en la ahorca o purgar largas cadenas en la cárcel.

Al presentar su propia defensa, el inculpado Oscar W. Neebe, narró cómo ocurrían las cosas tras los sucesos de Haymarket: “En la mañana del 5 de mayo (1886) supe que habían sido detenidos Spies y Schwab y entonces fue también cuando tuve la primera noticia de la celebración del mitin de Haymarket durante la tarde anterior. Después que terminé mis faenas fui a las oficinas de El periódico de los obreros (Arbeiter Zeitung), en donde encontré a la esposa de Parsons y la señorita Holmes. Cuando iba a hablar con la primera de dichas señoras, entró de pronto una manada de bandidos, llamados policías, en cuyos rostros se retrataba la ignorancia y la embriaguez, gentes de peor calaña que los peores rufianes de las calles de Chicago.

“El mayor Harrison iba con estos piratas y dijo: ‘¿Quién es el director de este periódico?’ Los chicos de la imprenta no sabían hablar inglés, y como conocí a Harrison me dirigí a él y le dije: ‘¿Qué pasa, señor Harrison? Necesito –me contestó– revisar el periódico por si contiene algún artículo violento’. Yo le prometí revisarlo y lo hice en compañía del señor Hand, a quien Harrison fue a buscar. Harrison volvió a los pocos minutos y vi bajar la escalera a todos los tipógrafos; otra pandilla de rufianes policíacos entró a tiempo que la esposa de Parsons y la señorita Holmes se hallaban escribiendo. Uno que yo tenía por un caballero oficial dijo: ‘¿Qué hacéis aquí?’ Y la señorita Holmes, respondió: ‘Estoy escribiendo a mi hermano, que es editor de un periódico obrero.’

“Al oír esto aquel oficial, la agarró fuertemente por un brazo, y ante las protestas de aquella señorita gritó: ‘¡Concluye, zorra, o te arrojo al suelo!’ Repito aquí estas palabras para que conozcáis el lenguaje de un noble oficial de Chicago. Es uno de los vuestros. Insultáis a las mujeres porque no tenéis valor para insultar a los hombres. Lucy Parsons obtuvo igual tratamiento, a la vez que le aseguraban que no se publicaría más el periódico y que arrojarían por la ventana todo el material de la imprenta. Cuando oí esto, cuando vi que se pretendía destruir lo que era propiedad de los obreros de Chicago, exclamé: ‘Mientras pueda haré que el periódico se publique.’ Y volví a publicar el periódico; cuando se nos echaron encima los policíacos bandidos y todas las imprentas se negaron a imprimirlo, reunimos fondos y adquirimos imprenta propia, mejor dicho, dos imprentas; se multiplicaron los suscriptores, y en fin, los trabajadores de Chicago cuentan actualmente con todo lo necesario para la propaganda. ¡He ahí mi delito!’

Por otro relato que nos legó Alberto Parsons (véase su discurso), podemos entender que primero discutió con su esposa Lucy, su posible entrega a la policía y correr la misma suerte que sus compañeros detenidos y juzgados. Todo indica que la tenacidad, entrega y decisión de Lucy fue muy importante para acompañar a su esposo en la lucha sindical histórica de los Estados Unidos.

Tras la detención y el juicio a los inculpados por los sucesos de Haymarket, Lucy recorrió el país (cargando a sus pequeños hijos), generando un gran movimiento en defensa de los inculpados. Un historiador escribió: “La protesta solitaria de Lucy creció hasta alcanzar a millones”

Tras el ahorcamiento de su esposo, Lucy siguió recorriendo el país, organizando a las trabajadoras y escribiendo para los periódicos sindicalistas.

Contribuyó a la fundación de la organización denominada Defensa Internacional del Trabajo (ILO, por sus siglas en inglés). Participó en las movilizaciones de 1890, cuando se conmemoró por primera vez el 1° de Mayo, en Estados Unidos.

Lucy no podía faltar a la constitución de los Trabajadores Industriales del Mundo (IWW, por sus siglas en ingles), conocidos con el sobrenombre de Wobblies. Apenas contaba con 52 años de edad y, dos vientos del cambio soplaban para el mundo del trabajo: el nacimiento de una nueva central sindical combativa en los Estados Unidos y, aunque parecía muy lejano, el soplido de la primera Revolución Rusa de 1905.

El congreso fundacional de la IWW, arrancó en la ciudad de Chicago el 27 de junio de 1905, tras emitirse un famosos Manifiesto, cuya ideología estaba salpicada por el anarcosindicalismo: “debe establecerse como organización económica de la clase trabajadora, sin afiliarse a ningún partido político. Todo el poder debe descansar en una afiliación colectiva.”.

Lucy no firmó ese Manifiesto, solamente, entre las sindicalistas, la famosa Mamá Jones, rodeada de puros varones que formaban parte del Comité Organizador.

Sin embargo, nos cuenta el prestigiado historiador del Movimiento Obrero Estadunidense, Philip S. Foner, en su monumental Historia de Las Mujeres y el Movimiento Laboral Americano: “a la Convención llegaron 12 delegadas, incluyendo a Mamá Jones, Lucy (González) Parsons (la viuda de uno de los Mártires de Haymarket), Emma F. Langdon de la Unión Tipográfica No. 49 de Denver, y Huella Twinning, delegada de la Unión Federal No. 252 del Sindicato Americano No. 3 y, un movimiento sindical industrial activo, principalmente en el oeste y precursor inmediato del IWW. En el nombramiento de Mamá Jones, Langdon fue designada la Secretaria Auxiliar de la Conferencia, y Twining sirvió como Maestra de Ceremonias al cierre de los discursos”.

Lucy Parsons, fue la única de las doce delegadas que se dirigió a la Convención por unos minutos.

En aquella histórica sesión del 29 de junio de 1905, con voz pausada, la viuda de los Mártires de Chicago, dijo al auditorio:

“He tomado la palabra porque ninguna otra mujer ha respondido, y siento que no estoy fuera de lugar para decir a mi manera algunas pocas palabras sobre este movimiento.

“Nosotras, las mujeres de este país, no tenemos ningún voto, ni aunque deseáramos utilizarlo, y la única manera que podemos estar representadas es tomar a un hombre para representarnos. Ustedes los hombres han hecho de él tal lío en la representación de nosotras que no tenemos mucha confianza en preguntarles; y yo me sentiría rara al pedirle a un hombre que me represente. No tenemos ningún voto, sólo nuestro trabajo... Somos las esclavas de los esclavos. Nos explotan más despiadadamente que a los hombres. Dondequiera que los salarios deban ser reducidos, los capitalistas utilizan a las mujeres para reducirlos, y si hay cualquier cosa que ustedes los hombres deben hacer en el futuro, es organizar a las mujeres.”

Y, como Lucy no era partidaria de la lucha electoral, dejó muy en claro sus verdaderas ideas:

“Creo que si cada hombre y cada mujer que trabaja, o quienes laboran en las minas, molinos, talleres, campos, fábricas y las granjas en nuestra amplia América, deben decidir lo que por derecho les pertenece, entonces ningún ocioso vivirá en su trabajo, y cuando su nueva organización, su organización económica, declarará al hombre como hombre y a la mujer como mujer, como hermanos y hermanas, ustedes determinarán que cosas poseen, pues no hay ningún ejército por grande que sea para superarlos, porque vosotros constituyen un ejército."

En ese lejano año de 1905, había estallado la primera Revolución Rusa, por lo que Lucy, volvió a tomar la palabra para decirles a los delegados Wobblies: “deben imbuirse del espíritu que ahora se despliega en la lejana Rusia y Siberia, dónde nosotros pensábamos que la chispa de la hermandad se había apagado. Tomemos su ejemplo".

En el XX Aniversario del ahorcamiento de los Mártires de Chicago (11 de noviembre), Lucy, recordó en 1907 que las manifestaciones llevadas a cabo en Chicago, “son un gran éxito desde muchos puntos de vista”, ya que notablemente habían participado “un número creciente de gente joven”. Por lo cual, haciendo referencia a las palabras de Alberto Parsons, escribió: “La voz del pueblo todavía será escuchada”.

El 15 de diciembre de 1911, escribió un balance sobre los efectos que produjo la publicación de Los famosos discursos de los Mártires de Haymarket, donde señaló: “A 18 meses de que los publiqué (...) En este tiempo he viajado de Los Ángeles a Vancouver, de California a la ciudad de Nueva York, dos veces. He dedicado mis energías enteras a los Locales (sindicales)... El resultado es que he vendido 10.000 copias...” y anunció “la sexta edición, con 12.000” ejemplares más.

Lucy afirmó contundentemente: “Miro estos discursos como el pedazo más grande de la literatura de la propaganda (revolucionaria)...”

El 1° de Mayo de 1912, Lucy recordó, en un artículo, la tragedia de La Plaza del Heno: “El mitin de Haymarket es referido históricamente como ‘el alboroto de los anarquistas de Haymarket’. No había alboroto en Haymarket a menos que la policía se desenfrene. El Alcalde Harrison asistió al mitin (...). La gran huelga de mayo de 1886 fue un acontecimiento histórico de gran importancia, ya que era la primera vez que los trabajadores mismos habían procurado conseguir un día laborable más corto por la acción unida, simultánea.... Esta huelga fue la primera Acción Directa a gran escala”.

Lucy, adelantándose a su tiempo sentenció: “Por supuesto, la jornada de ocho horas es tan anticuada como las uniones (sindicatos) mismas. Debemos agitar hoy por una jornada laborable de cinco horas.”.

En 1913, a los 60 años de edad, fue arrestada por la policía en Los Ángeles, CA., pero recibió una gran solidaridad, especialmente, de los trabajadores de San Francisco, quienes se movilizaron en su defensa.

En 1926, Lucy escribió: “Parsons, Spies, Lingg, Fischer y Engel: ustedes no están muertos. Ustedes están empezando a vivir en los corazones de todos los verdaderos amantes de la libertad. Ahora, después de cuarenta años que ustedes se han ido, miles que entonces eran nonatos, están ávidos por aprender de sus vidas y martirio heroico, y cuando los años se alargan, el más brillante lustrará sus nombres, y ustedes llegarán a ser apreciados y amados.”

Por el contrario Lucy, sentenció sobre los verdugos de Chicago: “Aquéllos que tan suciamente los asesinaron, bajo los formulismos de ley en una Corte de supuesta justicia, serán olvidados.”

Terminó su escrito con las siguientes palabras: “Descansen, camaradas, descansen. ¡Todos los mañanas son suyos!”.

En 1927, formó parte del Comité Nacional de Defensa del Trabajo Internacional, que defendió a los activistas sindicales y afro-americanos como Angelo Herndon.

Muchos años después, en noviembre de 1937, Lucy recordó la mañana en que llevó a sus dos hijitos a darle el último adiós a su querido Alberto Parsons: “En esa mañana melancólica del 11 de noviembre de 1887, llevé a nuestros dos pequeños niños a la cárcel para darle mi adiós a mi amado. Encontré la cárcel sellada por fuera con cables pesados. Los policías con sus pistolas caminaban por el recinto.

“Yo les pedí que nos permitieran ir con nuestro amado antes de que lo asesinaran. No dijeron nada. Entonces les dije: ‘dejen a estos niños dar a su padre el adiós; déjenlos recibir su bendición. No pueden hacer ningún daño’.

En pocos minutos una patrulla nos detuvo y nos encerraron en la comisaría de la policía, mientras el hecho infernal se consumaba. Oh, miseria, he bebido la taza del dolor a sus heces, pero sigo siendo una rebelde”.

A los 89 años, Lucy seguía activa, cuando la muerte la sorprendió en Chicago, al incendiarse su hogar en el año de 1942.

Tras 62 años de activismo político-sindical, su vida se esfumó, pero la policía de Chicago, la seguía considerando una amenaza, por lo que sus documentos personales fueron sustraídos de aquel hogar destruido.

En México no se le ha recordado, desde que en 1892, se organizó la primera conmemoración del 1° de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores y de los Mártires de Chicago.

El 1 de julio de 1992, en Boston, se fundó el Centro de Lucy Parsons, a partir del Almacén Rojo del Libro, constituido en 1969. Dicho Centro funciona como una librería, además de ser una organización no lucrativa y sostenida por sus simpatizantes, según lo informan en su página Web.

En el local del Frente Auténtico del Trabajo (FAT), de la ciudad de México, se encuentra un mural donde está dibujada Lucy. El Mural fue pintado en colaboración con la Union Electric (UE) de EUA. Hasta donde sabemos, es el único lugar de México dónde se le recuerda de ésta manera.

Lucy González Parsons debe figurar entre las grandes sindicalistas que hicieron posible la conquista de la jornada laboral de 8 horas para los trabajadores del mundo, por ello, su nombre debe estar también escrito, a la par que los Mártires de Chicago.

Lucy no fue la única mujer, ni la única trabajadora o sindicalista que puso su grano de arena en pro de los derechos femeninos en la Unión Americana, a fines del siglo XIX y principios del XX; pero para los mexicanos debe ser una figura representativa de su época, precisamente por tratarse de una paisana nuestra; una de las últimas mujeres nacida de madre mexicana cuando Texas nos pertenecía.

Junto a su nombre, también figuran grandes mujeres estadunidenses de origen irlandés, como Mamá Jones; o las nativas representadas por Emma F. Langdon (de la Unión Tipográfica de Denver, Colorado) y Huella Twinning (miembro de la Unión Federal del Sindicato Americano No. 3) entre muchas otros nombres femeninos que a base de mucha lucha, sacrificio y tenacidad, fueron conquistando los derechos humanos, laborales y políticos para las trabajadoras en el país que en ese entonces empezaba a despuntar como el “gendarme del mundo”.